Una fiesta de cumpleaños que acabó en tragedia

Ambos se conocían y fueron invitados a la celebración, que tuvo lugar en un piso de la calle Dionisio Acedo, situada junto al parque del Perú. Era el viernes de preferia. Cuando ya llevaban un tiempo en la fiesta, los dos implicados tuvieron un desencuentro relacionado con una chica, que también estaba en el cumpleaños, según esas mismas fuentes.

En un primer momento, el menor decidió irse a su casa. Transcurrido un tiempo, volvió a la calle para retornar al cumpleaños, esta vez con un cuchillo. Su padre, que le vio salir del domicilio familiar, alertó al 112 de que su hijo llevaba un arma blanca. El menor regresó a Dionisio Acedo, donde a plena luz del día (en torno a las ocho de la tarde), se encontró con el otro joven, que estaba ya en la calle con otro cuchillo, tal y como apuntan las fuentes al tanto del contenido del atestado. Había cogido el cuchillo que se utilizó para cortar la tarta en la fiesta de cumpleaños.

Comenzó así la pelea que acabó con el fallecimiento del joven de 18 años, con una puñalada cercana al tórax que le ocasionó la muerte. El menor, por su parte, sufrió un corte en el cuello y tuvo que ser intervenido de urgencia en el Hospital Universitario de Cáceres, donde permaneció hasta el sábado por la tarde, momento en el que fue trasladado al Marcelo Nessi. La instrucción del caso se encargará de determinar quién inició la reyerta y los detalles exactos de los hechos.

Entre las pesquisas que está llevando a cabo la Policía Nacional y las investigaciones que permitirán arrojar luz a lo ocurrido el pasado 23 de mayo, está el volcado del contenido de los teléfonos móviles de los dos participantes en la pelea para analizar los mensajes de whatsapp enviados esa misma tarde.

Hay que recordar que el enfrentamiento se produjo en la esquina de la calle Dionisio Acedo con García Plata de Osma. Fue en este punto donde los dos jóvenes se hirieron. Posteriormente, el de 18 años caminó unos metros y fue socorrido inicialmente por un empleado del supermercado Provecaex, situado a escasa distancia del lugar de los hechos, que se encontraba en una pausa de trabajo. Poco después se desvaneció junto a unos contenedores cercanos. Los servicios sanitarios intentaron reanimarle durante 45 minutos, pero no fue posible salvar su vida. Fue enterrado el pasado domingo en Torrejoncillo, de donde procede su familia.

El menor internado en el Marcelo Nessi se expone a una posible pena de hasta ocho años de internamiento, según han detallado a este diario fuentes jurídicas. La Fiscalía de Menores, que es la encargada de instruir el caso, investiga este suceso como un presunto homicidio. No obstante, a la hora de determinar la pena influirán factores como la intencionalidad y las atenuantes que pueda demostrar la defensa del menor, que ha asumido el abogado penalista Emilio Cortés.

A los años de internamiento de la condena se añadirá la responsabilidad civil, que podría llegar a rondar hasta los 200.000 euros. Al tratarse de un menor, esta responsabilidad recaería sobre sus progenitores. Una vez que sea mayor de edad, podría decidir si continuar cumpliendo la pena en un centro de internamiento o en una prisión convencional.

Hay que recordar que el pasado fin de semana el juzgado de guardia, a petición de la Fiscalía de Menores, decretó en un auto el internamiento en régimen cerrado del menor. En el Marcelo Nessi deberá seguir, además, un tratamiento terapéutico.

De acuerdo a la jurisdicción de menores, hasta que no finalice el periodo de instrucción, que lleva a cabo la Fiscalía, el caso no pasará al juzgado, bien para su archivo o para la apertura de juicio oral.

El fallecido había estudiado en el colegio Giner de los Ríos y en el IES Universidad Laboral. Jugaba al baloncesto en el club ADC.