El escultor Antonio Morán se encadena para que su estatua no se mueva de la plaza de Ansano de Plasencia

«El señor alcalde ha decidido llevarla al exterior de la ciudad, a los páramos y sacarrales al lado del Palacio de Congresos», denunciaba Morán desde la propia plaza, con una cadena al cuerpo. «Esta obra ya tiene una identidad en esta plaza. No puede ser tratada como un objeto decorativo al que se le cambia el sitio sin más», añadió.

En abril de 2024, un juzgado de Plasencia dio la razón a Morán y obligó al Consistorio a restaurar la escultura y a indemnizar a los autores con 15.000 euros por la vulneración de sus derechos como creadores. Aunque el Ayuntamiento acató la sentencia -la indemnización fue abonada en septiembre-, el fallo no especificaba la ubicación concreta de la obra, lo que ha dado lugar a nuevas tensiones.

En enero de 2025, el juzgado precisó que la restauración debía ser realizada por el propio autor y dio dos meses al Consistorio para cumplir el fallo. En abril, volvió a recordar al Ayuntamiento que el derecho de autor prevalecía y que debía ser Morán quien ejecutase la intervención.

Decreto de traslado

El pasado 14 de mayo, el Ayuntamiento firmó un decreto que fija la nueva ubicación de 'Escena Tercera' en las inmediaciones del Palacio de Congresos, justificando que la plaza de Ansano «no es el lugar más adecuado para la ciudad» y que la restauración debería hacerse en el lugar donde la escultura permanecerá definitivamente.

Morán considera esta decisión una traición a los compromisos previos: «Estoy aquí para solicitar al alcalde que cumpla con lo que él mismo prometió el día que se inauguró la obra. Se acordó, con Caja Extremadura como parte donante, y con la entonces alcaldesa Elia Blanco, que la escultura se colocaría en el eje central de la plaza de Ansano. Y él se comprometió en rueda de prensa a mantener esa ubicación».

El escultor explicaba que recibió la notificación municipal ayer mañana, en la que se le instaba no solo a aceptar el traslado, sino también a colaborar en la retirada de la escultura: «Eso, sin ni siquiera haber consensuado nada conmigo. No ha habido ni una conversación. Actúa unilateralmente, como un sheriff. Yo estoy aquí para protestar por esa decisión autoritaria».

El artista no descarta volver a acudir a los tribunales si el Ayuntamiento persiste en su decisión. «Si levantan la escultura, presentaremos una nueva demanda, esta vez por prevaricación», advirtió. «Ya han incumplido la sentencia en dos ocasiones. Que se atengan a las consecuencias»

A pesar de la tensión, Antonio Morán mantiene su propuesta de solución: «Ubicarla en el eje central de la Plaza de Ansano, como se acordó. Nos damos la mano, reinauguramos la obra y todos contentos. Pero estoy convencido de que eso no va a ocurrir. Ni siquiera han querido sentarse a hablar».